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Según la revista Panorama, que reporta información de medios de
Jerusalén, el Mossad llevó a cabo la simulación en la región de Herzliya, y en
otra localidad secreta, reproduciendo todos los posibles escenarios de un
ataque.
Una
simulación, que involucrando a los servicios de inteligencia de varias
naciones, tuvo como finalidad reforzar “la prevención estratégica”, no solo en
“objetivos” europeos, sino en este caso también en el Vaticano.
Efectivamente, en el encuentro participaron
miembros de los servicios secretos, además que de Israel, también de Alemania,
Italia, Francia y del mismo Estado del Papa.
Rita Katz, directora de la influyente agencia
israelí Site intelligence, escribió que uno de los últimos ‘poster’
propagandísticos del Estado Islámico (o Isis), denominado Christmans blood
(sangre de Navidad), en el que se ve la fachada de la Basílica de San Pedro,
“es una específica directiva” para efectuar ataques “inspirados en el Estado
Islámico”, en el Vaticano y en Occidente en general. En otras palabras, es un
mensaje para los combatientes del Isis en Europa (los llamados foreign
fighters) y en este caso en particular en Italia. El Vaticano ya desde hace
tiempo ha reforzado su vigilancia.
Con información de: El Sol de México
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